Los
días siguientes todo fue volviendo a la normalidad, los vecinos regresaron a
sus casas.

Pero,
consiguieron que finalmente los bidones fuesen llevados al muelle Allumina-
Aluminio, actual (Alcoa) en San Cibrao, donde se repitieron los enfrentamientos
impidiendo también el paso de los camiones.

Muchos
de los trabajadores fueron reincorporándose a sus respectivos trabajos, pero ya
era demasiado tarde, se abrió un expediente de regulación de empleo para
aproximadamente 574 trabajadores, les costó el empleo a 116 de estos,
despedidos por causas disciplinarias. Por haber desatendido la orden de prestar
servicios mínimos.
Los
demás trabajadores si pudieron recuperar su empleo, estos 116 no.

A pesar
de todo el apoyo social, a los pocos días todo fue volviendo a la normalidad y
los bidones finalmente fueron llegando a su destino.
En 2017
treinta años después de su naufragio, se
procede a desguazar el barco que todavía seguía en la zona de la playa do Rostro, que ya era un amasijo de hierros donde
habitaban numerosos peces como sargos o pulpos…