En un pueblo de Lugo, en el Castillo de Doiras vivía un caballero de nombre Froiaz,
que tenía dos hijos Egas y Aldara.
EL hijo
de un caballero de la ciudad vecina llamado Aras se enamoró perdidamente de
Aladara, este amor era correspondido, ambos se querían más que nada en el mundo
y con el paso de los días en su cabeza la idea de casarse iba tomando forma.
Aras le
regaló un precioso anillo de oro, con una piedra roja, casi tan hermoso como su
prometida. Tenían planeada su boda hasta
el más mínimo detalle.
Pero
unos días antes de la boda, Adara desapareció misteriosamente, Egas y Aras
salieron a buscarla junto con toda la gente del pueblo y los soldados…. Recorrieron
todos los pueblos vecinos, los frondosos bosques que rodeaban el castillo, pero
no pudieron econtrarla; suponían que estaría
herida o muerta debido al ataque de un jabalí o algún oso.
Después de una semana de búsqueda en vano, se rindieron.
Varios
años después, un día en el que Egas estaba cazando en boque pudo ver cerca de
un pequeño arrollo, una preciosa cierva blanca bebiendo. Este sin titubear ni
un momento, lanzo una flecha certera matando al animal en cuestión de segundos.
Satisfecho con su caza, quiso llevársela a casa para que todos pudiesen
contemplar aquel maravilloso animal. Pero cuando se disponía a cargarlo pesaba
demasiado, y se estaba haciendo de noche; asique corto una pata delantera de la
cierva para llevarla como trofeo.
Cuando
llego a casa, corrió a enseñársela a Aras, ambos se quedaron petrificados al desenvolver
la tela que cubría aquella pata, para su asombro, vieron una preciosa mano
blanca que portaba un anillo con una piedra roja. En ese instante Aras se dio cuenta
que era la mano de Aldara; asique en medio de aquella noche con el corazón desgarrado
se dirigieron al arrollo para comprobar si todo eso era real.
Cuando
llegaron allí estaba postrado el cuerpo de la joven Aldara, inerte sobre la
hierba al lado del arrollo.
La
leyenda cuenta que Aldara fue maldecida por algún Mouro o alguna Bruja por eso
nunca pudo regresar con su amor.
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